Escribe: Mario Castro Ganoza
[DESDE TOKIO]
Cuando se pensaba que Tokio 2020 se había librado del flagelo del dopaje, los organizadores anunciaron que el medallista británico CJ Ujah que obtuvo una medalla de plata en la prueba de 4×100, y otros tres atletas que compitieron en los juegos fueron suspendidos provisionalmente después de que sus muestras de orina dieran positivo a sustancias prohibidas.
La Agencia Internacional de Pruebas (ITA, por sus siglas en inglés) dijo que la muestra de Ujah dio positivo para dos sustancias prohibidas: moduladores selectivos del receptor de andrógenos (SARM), que se pueden usar como un agente que mejora el rendimiento, y Ostarine, un agente anabólico.
Los otros tres que dieron positivo fueron el velocista keniano Mark Otieno Odhiambo, por un esteroide anabólico; el lanzador de peso georgiano Benik Abramyan por esteroides y fármacos hormonales; y el corredor de 1.500 metros Sadik Mikhou de Bahrein, por una transfusión de sangre, que está prohibida.
Se realizará un segundo análisis a las muestras para confirmar el dopaje, y si se confirman los resultados de la primera prueba, tanto Ujah como el resto del equipo de relevos 4×100 ganador de la medalla de plata, serán automáticamente descalificado.
La Unidad de Integridad del Atletismo dijo que ha iniciado procedimientos disciplinarios contra los cuatro atletas, pero está esperando que la ITA complete su investigación para averiguar si se violaron las reglas de dopaje y cuáles serán las consecuencias.