“¿Aún están abiertas las inscripciones para Rotterdam?”, pregunta Gladys Tejeda y al tener una respuesta afirmativa, sonríe. La maratonista peruana se alista para reaparecer en una competencia oficial y por el momento ha hecho su primera aparición pública luego de conocer que sí podrá correr en Río 2016.
Acompañada por Jorge Canales, abogado que la asesoró en su proceso de defensa luego de dar positivo en el test antidoping de los Juegos Panamericanos Toronto 2015, Tejeda agradeció el apoyo de quienes siempre la respaldaron.
“Agradezco a mi familia, a mis abogados, a mi país, porque siempre confiaron en mí. Hasta recibía invitaciones de diferentes localidades para recibirme. Nunca me sentí sola, siempre me sentí respaldada y especialmente por mis abogados, que hicieron lo posible para enviar a la IAAF los documentos que terminaron con la solución de mi caso”, comentó.
Pero en todo este proceso, Gladys también se quebró. La tristeza e incertidumbre de saber qué pasará con su carrera deportiva le causaron una depresión de la recién hoy se anima a contar:
“Hubo personas que especularon mucho y pasé por momentos muy difíciles, tuve que prepararme para cualquier resultado. Me recomendaron no dejar de entrenar y eso estuve haciendo. Mi entrenador estuvo atento, sino me hubiera deprimido más”.
Ahora Gladys se prepara para su reaparición, volverá a Junín y ahí se quedará hasta fin de mes porque ya tiene planeado realizar una base de entrenamiento en México. “Voy a seguir adelante con más fuerza porque tengo un objetivo más grande: Río 2016”.