Escribe: Franco Sánchez Rodríguez 

El atletismo corre por sus venas. Y es que lo lleva en la sangre. Jhenifer Melchor Huiza reconoce que al escuchar sus apellidos la gente alza la cabeza y la observa. Prima menor de Inés Melchor, ella se sonroja al entender lo que conlleva el ser pariente de una de las atletas más reconocidas y galardonadas del país y, además, practicar el mismo deporte. Sin embargo, está orgullosa de eso.

 

A sus cortos 17 años, Jhenifer ha conseguido considerables resultados a nivel local. Medallista en la etapa final de los Juegos Escolares 2019, presea de bronce en los 3,000 metros planos del reciente Campeonato Nacional Sub-18, son algunas de sus conquistas.

“Me gustan todos los deportes, especialmente el atletismo. Vengo de la escuela de mi prima Inés Melchor, quien me llevó al estadio por primera vez. De la mano de Inés comencé en esto. Seguir sus pasos me da una emoción tremenda y un empuje mucho mayor”, sostuvo la joven atleta.

Foto: Franco Sánchez Rodríguez

 

Comparte sus estudios y los entrenamientos. Por las mañanas se levanta temprano para cumplir con su labor estudiantil y por las tardes se prepara arduamente en su natal Huancayo. Ese es su día a día desde que decidió emprender en el mundo del deporte, allá por el 2016.

Pese a que muchos la confundan como la hermana de la plusmarquista sudamericana, Jhenifer disfruta de este divertido momento. “Es muy bonito apellidarse Melchor Huiza, porque todos ya te conocen. La gente dice: ‘ella es la hermanita de Inés’. Les respondo que tengo los dos apellidos, pero que soy su prima”, contó esbozando una sonrisa.

Paso a paso, Jhenifer Melchor se quiere ganar un lugar en la élite del atletismo peruano. En un tiempo aproximado, refiere que desearía correr una maratón y ser partícipe de grandes certámenes, como unos Juegos Panamericanos u Olímpicos.  Depende de ella demostrar que así será.